jueves, 22 de septiembre de 2011

La estación del renacimiento

Se dice que los nacidos en el mes de junio somos hijos de la primavera. Concebidos durante la época de floración, de los primeros calores, del enamoramiento, de los días de sol y las noches más fresquitas que alientan a estar más cerca de la persona querida; será tal vez por eso que tanto me gusta este tiempo de flores, colores y perfumes. Porque yo nací justamente a mitad de año.
No importa ya si la primavera comenzó el 21 de septiembre o ocurrirá recién mañana, lo cierto es que el hermoso día que hay afuera me indica que ya estamos transitando esta nueva estación, se nota en el ánimo de la gente (aunque siempre hay más de un mala onda), en el trinar de los pajaritos o en la cantidad de flores que hay por doquier.
Y a propósito de este cambio de estación me vino a la memoria una historia de primavera.  La escuché una noche en la radio mientras escuchaba a Alejandro Dolina en su programa “La venganza será terrible”. Se trataba de la explicación popular que daban los griegos a esta época del año. Me imagino que muchos la conocerán o al menos habrán escuchado o leído en alguna clase de Historia Antigua en la secundaria y que se conoce como El rapto de Perséfone. Bueno espero que disfruten de la primavera y de este relato que aquí les dejo.

HISTORIA DE DIOSES GRIEGOS

Desde siempre los hombres han utilizado narraciones fundamentales para responder a preguntas básicas de la vida como la razón para existir, la razón de lo que nos rodea, esas explicaciones pertenecen a las creencias de cada pueblo y son netamente culturales. En ese sentido la primavera es vista como lo muerto que renace. Una vez más para esta época del año ocurre el milagro: de los arboles deshojados renacen nuevos brotes y, una vez más, hay cosecha, es decir, vida.
Para explicar este ciclo muchos siglos antes que lo hiciera la ciencia y desmitificara todo, los pueblos antiguos explicaron este proceso, este cambio, con la historia de Démeter, Perséfone y Hades.
La historia es básica -pero bien vale para el guión de una película sobre todo ahora que están de moda nuevamente los filmes vinculados a las divinidades de Grecia-, las diosas Démeter y Perséfone -Ceres y Proserpina para los romanos- representaban para los pueblos de la antigüedad los poderes de la naturaleza, su transformación y la emergencia cíclica. En la antigua Grecia, el primer día de la primavera era el día en que Perséfone, prisionera de Hades bajo tierra durante seis meses, volvía al regazo de Deméter, su madre.
Según explican los especialistas en mitología griega este relato se conoce por los poetas griegos de la segunda mitad del primer milenio Antes de Cristo, entre ellos Homero (siglo VIII a.C.) que tomaron el mito de una tradición oral anterior, varios siglos después de las invasiones de nómades guerreros de las estepas caucásicas producidas durante la Edad de Bronce y de Hierro, conocidos como indoeuropeos. Al parecer el mito de Deméter y Perséfone procede de una tradición agrícola pre-helena que adoraba a la Gran Diosa, la creadora primigenia en la Antigua Europa y Medio Oriente.
Las versiones griegas relatan que Hades, dios que rige en el Tártaro (Inframundo o Mundo de los Muertos) secuestra a Perséfone, la hija primaveral y hermosa de Démeter cuando ella recogía flores en los campos acompañada de un cortejo de ninfas, para hacerla su esposa a la fuerza. Al parecer el terrible Hades había pasado por allí con su temible carro tirado por caballos y al ver a Perséfone se encandiló con ella y la raptó para llevarla al subsuelo, su territorio. Las ninfas fueron transformadas en las Sirenas por no haber intervenido.
La vida quedó paralizada mientras la desolada Deméter (diosa de la Tierra y la fertilidad), al no encontrar a su hija, emprendió una búsqueda desesperada de nueve días y nueve noches. Abandonó el Olimpo (sede de los dioses) y comenzó a buscar a la joven. Durante su dolorosa travesía no bebió ni comió nada. Iba acompañada por Hécate, la diosa de las Encrucijadas (o Anciana Sabia). Démeter se vistió de negro en señal de duelo, transformando su belleza y esplendor divino en la imagen de una madre humana angustiada.
En su peregrinaje llegó a la casa de la reina Metanira en Eleusis (al Norte de Atenas) y fue tomada como nodriza de Demofonte, hijo menor de la reina. En agradecimiento por la hospitalidad Démeter decidió convertir al niño en inmortal colocándolo en el fuego sagrado. Pero la reina asustada interrumpió el proceso y a la diosa no le quedó alternativa que descubrir su verdadera identidad. A partir de ese momento dio indicaciones para que se construyera su templo en ese lugar donde por miles de siglos se llevarán a cabo sus misterios sagrados y se le rindió culto. Además, entregó a Triptólemo, otro hijo de la reina, un carro tirado por serpientes y las semillas para que difundiera uno de sus mayores dones: la agricultura. Este joven príncipe había informado a Démeter sobre el rapto de Perséfone presenciado por sus hermanos que vieron cómo se abría la tierra para que entrara un carro tirado por corceles negros. El rostro del conductor era invisible y con el brazo derecho sujetaba fuertemente a una muchacha que gritaba.
Con esa información, Deméter y Hécate recurrieron ante Helios, el dios Sol "que todo lo ve" para que admitiera ante ellas quién fue el raptor. Helios confirmó la sospecha de Démeter: Hades, el hermano de Zeus había sido el secuestrador. La madre estaba tan indignada que dejó de sustentar la vida, impidiendo que floreciera sobre la tierra.
Zeus le envió regalos y mensajes a la diosa para que depusiera su actitud y aceptara los hechos, es decir su voluntad y la de su hermano. Pero ella respondió que la tierra seguiría estéril hasta que Perséfone fuera devuelta. Ante la falta de alternativa porque la vida moría sobre la tierra, Zeus ordenó a su hermano que devolviera a la joven, indicándole que si no lo hacía "todos estaremos acabados". También le respondió a Démeter que su hija sería restituida siempre y cuando no hubiera probado la comida de los muertos.
Mientras tanto, en el Inframundo, Perséfone lloraba continuamente, negándose a comer o beber los manjares que Hades le ofrecía. Ocultando su enojo y contrariedad por la noticia recibida Hades se acercó a la joven y le comunicó que él la dejaba en libertad porque veía que era desdichada y su madre lloraba por ella.
Perséfone dejó de llorar inmediatamente y aceptó las semillas de una granada que Hades le ofrecía. Finalmente, en Eleusis, Démeter se reencontró con su hija abrazándola llena de alegría. Pero un testigo informó sobre la granada y Démeter se sintió muy desalentada al saber que su hija había comido en el mundo de los muertos quedando así vinculada a Hades para la eternidad. Entonces dijo: "No volveré al Olimpo ni anularé mi maldición sobre la tierra".
Desesperado viendo un futuro muy negro, Zeus instó a Rea, madre de Hades y demás dioses olímpicos que suplicaran a Démeter que no cumpliera su amenaza. Al final se llegó a un acuerdo: Perséfone pasaría tres meses con Hades en el Tártaro y el resto del año con Démeter sobre la faz de la tierra.

¿MORALEJA?

Y aquí viene la parte que a las mujeres no nos gusta y que tiene que ver con la explicación y/o interpretación de esta historia. Estuve leyendo que este mito griego como muchos otros sirvieron en su momento para crear en la conciencia femenina la dependencia al varón y atemorizar a las mujeres con la violencia o la violación para que dejaran de actuar libremente como sucedía en época de la Diosa pre-patriarcal (Démeter y Perséfone) y así afirmar el dominio masculino en lo sagrado como en lo cotidiano.
Hay que tener en cuenta que como diosa madre, Deméter engendró a su hija y juntas con la creación simbolizaban la primavera y la agricultura. Se contaba que ambas vivían juntas poniendo en marcha los ciclos de vida cósmica, vegetal, animal, humana. Perséfone recibió las iniciaciones de la madre para colmar de poder y sabiduría esos ciclos, ejerciendo como protectora de las leyes de la diosa Madre. A medida que creció y maduró, la hija comenzó a alejarse de la Madre. Recorrió distintos lugares animando la creación y por donde ella caminaba todo crecía y florecía.
Luego del rapto, con el retorno de la primavera cuando la hija emerge del Inframundo, Démeter vuelve con cada equinoccio a poblar el mundo y la vida durmiente nace sobre la tierra: las hembras paren, las plantas florecen y los árboles dan sus frutos. Los humanos participan de este retorno primaveral expresando sentimientos de amor, amistad y solidaridad. Realizan alegres danzas; celebran ritos de iniciación de las nuevas generaciones de jóvenes y la vida de la comunidad como la de la naturaleza, se renueva. Hay festejos y esperanzas compartidas.
Aunque no sea más que un mito muy antiguo y que todo se haya materializado en estos días y que como indican los científicos la primavera comienza recién mañana, no podemos dejar de reconocer que los sentimientos primaverales de renacimiento están a flor de piel, en unos más que en otros. Yo propongo disfrutarlos aunque sea un poquito, aprender a reconocerlos en pequeñas florcitas aunque sea, seguramente nos cambiarán la visión un tanto oscura de estos tiempos.
Les dejó aquí algunas imágenes de bonitas flores que indican que Démeter, Perséfone  y  sobre todo la naturaleza, no nos abandona. Que las disfruten.

Todo comenzó con un error

Acabo de leer una noticia que indica que el equinoccio que marca el cambio de estación ocurrirá mañana exactamente a las 6.05 (hora argentina). El año pasado el cambio de estación también ocurrió el 23 de septiembre, pero unas horitas antes, a las 0.09. El año próximo, en tanto, llegará más temprano: aunque tampoco será el 21 de septiembre, sino el 22, a las 11.49. Según los especialistas, el comienzo de la primavera, en rigor, nunca se registrará el día establecido por convención, pues es astronómicamente imposible.
La información indica también que las estaciones no comienzan en fechas fijas ni duran lo mismo, debido, por un lado, a la inclinación del eje terrestre y a que no hay un ajuste perfecto entre el calendario y el camino del Sol. En el hemisferio norte la primavera dura 92 días y 9 horas, mientras que en el Sur apenas alcanza a los 89 días y 7 horas.
Aparentemente, la elección del 21 de septiembre como Día de la Primavera se debió a que los inmigrantes, que venían de festejarla en Europa los 21 de marzo, no repararon en ese dato científico y, al llegar a la Argentina, cometieron el error conceptual de fijar el 21 de septiembre.
Para saber cuándo empieza la primavera o el otoño habría que ver, en realidad, cuándo se producen los equinoccios: en el Norte, el de marzo cae siempre entre el 20 y el 21 de ese mes; en cambio, en el Sur, el de septiembre ocurre entre el 22 y el 23. Un equinoccio sucede cuando la eclíptica o camino aparente del Sol, traspasa uno de los dos puntos del Ecuador celeste: cero grado de Aries, en marzo, y cero grado de Libra, en septiembre.
Por otra parte, la fecha de celebración del Día del Estudiante se decidió en 1902, en recuerdo de la repatriación, desde Paraguay, de los restos de Domingo Faustino Sarmiento, el gran precursor de la educación, que llegaron al puerto de Buenos Aires el 21 de septiembre de 1888.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Spring time

El blog está cumpliendo cuatro meses y cada día que transcurre acumulo más y más ideas en la cabeza (y en un anotador) para futuros post. En esta ocasión, hago un alto en las publicaciones, sólo para explicarles que bien vale la pena ceder el fondo que caracteriza a este espacio para homenajear a la primavera, - a mí criterio - la mejor estación del año. Las flores y sus colores resultan fascinantes y por eso decidí que al menos hasta fin de mes permanecerá esta florida base. Espero que les guste y la disfruten tanto como yo.

jueves, 15 de septiembre de 2011

El lugar para las artes

El fin de semana estuve en Resistencia. Fui especialmente para ver la 1ª Bienal de Arte y Pintura del Chaco -que ideó y organizó el artista Milo Lockett- y tuve ocasión de ver a la gran mayoría de los 34 pintores invitados trabajando en vivo.

En el círculo central de la plaza 25 de Mayo se instalaron cada uno con un caballete y una mesita con pinturas, a desarrollar su arte. Pincel en mano, algunos optaban por concentrarse en la obra, otros a departir con los colegas o responder las inquietudes del público, que se acercaba a ver y a tratar de entender qué era toda esa movida cultural en pleno centro de la ciudad.

Entre ida y vuelta recorriendo la muestra, me llamó la atención cómo la gente transitaba de un lado a otro sin que la presencia de los artistas llamara demasiado su atención. No hay duda que los chaqueños están ya acostumbrados a diferentes despliegues artísticos. No me olvido que Resistencia es también sede de la tradicional Bienal Internacional de Esculturas, un concurso que se realiza cada dos años desde 1988 en el mes de junio y que el año que viene tendrá su 13º edición.

La ciudad desborda arte. En cada esquina, en cada boulevard, hay una escultura, una imagen o pintura en la pared. El arte público está presente y no tengo duda que allí se respira y se vive cultura; siempre que la visito continúo encontrándole obras y acciones nuevas.

Llevaba un tiempo bastante importante sin viajar a Resistencia y no conocía la Casa de las Culturas que se inauguró hace unos meses. Tengo que reconocer que ese mega edificio me sorprendió gratamente. Ubicada en una esquina frente a la plaza central y en diagonal a la Gobernación del Chaco, esta estructura deja impresionados a los visitantes.

No tardé mucho en entrar y recorrerla, sobre todo porque esta también fue sede de la Bienal de Artes y Pintura. A un costado de la entrada se exponía una serie de fotografías intervenidas sobre Nueva York en conmemoración al 9/11; mientras en la sala de exposiciones se exhibían los cuadros de los artistas que en esos momentos estaban pintando en la plaza. En tanto, en el primer piso, en el salón de conferencias tenía lugar una charla sobre los procesos creativos en la producción artística. Encuentros de VJ y bandas multimedias, recitales, debates y un millón de ofertas más.

Todo a la vez, todo al mismo tiempo y uno tenía que optar qué hacer, a cuál ir. Una multiplicidad de propuestas que te dejaban la sensación de querer más, de querer hacer todo, dividirte en cuantas partes sean necesarias para abarcar todo. Y la impresión que seguro tuvimos muchos, es que estaría bueno que se extendiera por más de los tres días que se programó para esta primera vez.

Por lo que estuve leyendo de las declaraciones de Milo Lockett el objetivo es mucho más ambicioso, pero muy valedero, y es que esta Bienal sea un impulso más para posicionar al Chaco como el Polo Cultural del Mercorsur.

Tal vez se logre, estaría muy bueno que ocurriera, sobre todo por el respaldo serio -al menos parece- que se está dando a la cultura, a las artes. Ojalá no quede sólo en un proyecto a futuro y sea una movida más de un año electoral en esa provincia y en el país. Sin duda en el 2013 veremos si esto fue así o no.

De todas formas, no creo que ninguno de los artistas que participaron se haya prestado con esa intención. Todo lo contrario, estoy segura que lo hicieron para ser parte del nacimiento de una acción cultural que dio y dará mucho que hablar en años venideros respecto al arte contemporáneo argentino.

Me parece justo mencionar a todos los artistas invitados que aceptaron participar de esta iniciativa: Alejandro Thornton (Buenos Aires), Anastasia Moisseff (Buenos Aires), Carol De Jong (Buenos Aires), Cesar Tschanz (Corrientes), Claudio Baldrich (Buenos Aires), Cristina Ferreras (Buenos Aires), Cristina Fresca (Buenos Aires), Dante Arias (Chaco), Diego Bastos (Córdoba), Emilio Fatuzzo (Buenos Aires), Felipe Giménez (Mar del Plata), Fernanda Piamonti (Buenos Aires), Germán Toloza (Chaco), Guillermo Llacay (Buenos Aires), Ignacio Zabalúa (Chaco), Javier Vargas (Chaco), José Mizdraji (Corrientes), Julián Matta (Chaco), Julio Zalazar (Chaco), Kiki Lawrie (Entre Ríos), Laura Asaro (Salta), Leonardo Blanco (Chaco), Lety Prone (Buenos Aires), Luciano Acosta (Chaco), Merche Vizcaya (Chaco), Noelia Farías (Córdoba), Norma Capponcelli (Corrientes), Paula Rivero (Buenos Aires), Pedro Cuevas (Buenos Aires), Ricardo Crespo (Buenos Aires), Roberto Rey (Buenos Aires), Rubén Kempa (Tucumán), Verónica Llobet (Buenos Aires) y Vicky Graglia (Buenos Aires).

Tal vez muchos no los conozcan, no sepan quiénes son, qué hacen, qué pintan, obviamente porque no están obligados a estar al tanto de la movida plástica en la argentina y sus exponentes actuales, pero puedo decirles que cada uno de ellos se viene gestando un nombre por sí solos en sus lugares. Algunos con más trayectoria y éxito que otros, pero es más que evidente que se merecían estar allí.

También quiero destacar una serie de performance en vivo, con un “personaje” super gracioso, -en sí ya es un personaje- Darío Zajdenberg, quien hizo reír a los presentes con la interpretación de distintos roles. Dicen que durante los tres días desarrolló seis personalidades distintas, yo sólo pude encontrar tres, el Doctor G, que cuestionaba todo, guiaba a los estudiantes por los distintos trabajos en la plaza, les explicaba sobre arte y trataba a la vez de establecer una relación entre el sexo y el arte. También estuvo Climax, el Super Héroe del Arte, justamente en defensa de las obras y la creatividad, y el Negro Mate. Sinceramente geniales, aportando una cuota de humor a todo el encuentro.

Y si de ser justos hablo, no puedo olvidarme de mencionar a los curadores de esta bienal: Federico Platener y Máximo Jacoby, y a los conferencistas: los fotógrafos Diego Frangi (Proyecto 365), Florencia Fabiano (People) y Alejandro González Iregui (Proyecto Distance), Manuela Rasjido, Enrique Salvatierra, Osvaldo Gómez; y por supuesto la Orkesta de Babel que estuvo tocando en el cierre del domingo.

En fin, la bienal me dejó la sensación de haber sido, aunque sea por un momento, parte de una acción cultural. De que yo era parte de la gestación de un encuentro artístico clave. Si ese era el objetivo de los organizadores, les puedo asegurar que tuvieron éxito. Aquí les dejo algunas fotos que “hablan” de lo que fue la primera BAP.

Fotos: www.bienaldeartechaco.com.ar

martes, 13 de septiembre de 2011

Todo lo malo puede pasar

Me jacto de no ser supersticiosa, de no creer en nada, pero me parece que esta vez el inconsciente me jugó una mala pasada, cuando hace un minuto al guardar el nombre de esta nota en la compu quedó como “Martes 12”, jajajaja. Como es natural en mí, supongo que es pura coincidencia y que apreté mal una tecla, nada más.
Hay quienes pensarán que es puro temor a este día de mala suerte, sobre todo porque desde ayer que estoy leyendo sobre el Martes 13, dado que en el diario tuve que escribir acerca de cuántos son los audaces que se animarán a contraer matrimonio este día. Por lo pronto puedo decirles que muy pocos, es más en donde estoy, ninguna pareja se arriesgó a pasar por Registro Civil.
En fin. Entre tantas cosas que estuve leyendo -y puedo decirles que hay toda sarta de pavadas al respecto- me encontré no solamente con que este martes es el primero del año que cae en 13 y que junto con diciembre, serán los dos únicos del 2011 (el año pasado hubo como tres o cuatro); sino que la luna llena estrena en este día.
La verdad que viéndola anoche mientras volvía a casa me quedaba extasiada por su belleza (eso me hace acordar a un dicho popular que me comentó una amiga el otro día que dice que no hay que festejar la luna porque perdés un amor, ja. A este ritmo ya nadie tendría nada si uno no dejara de admirarla, fotografiarla y compartir el sentimiento que nos genera).

OSCURAS PREDICCIONES
Al parecer según los expertos en astros y en el tema de los horóscopos la combinación de Martes 13 con luna llena potenciaría la mala suerte y todo puede pasar. Tras leer el pronóstico para hoy les digo que hasta una incrédula como yo no tendría ganas de salir de su casa, aunque con el calorcito y el día tan soleado que está afuera ¿cómo no hacerlo?
De acuerdo con los astrólogos lo primero que se destaca para la jornada de hoy es Betelgeuze (tuve que buscar qué era porque ya ni sabía de lo que hablaban. Es una estrella gigante roja, la más luminosa de la constelación de Orión) en el firmamento astrológico “al lado” de la Luna, lo que anuncia es guerras y carnicerías. Dicen los expertos: “lo que nos recuerda lo interpretado en el mapa de Luna llena de ayer, acerca de los crímenes que involucran a mucha gente, así que lo mejor será hacerle caso a la tradición y evitar estar en grupo” (jajaja, creo que no hace falta que Betelgeuze coincida con la luna para que esto pase en el mundo, de hecho últimamente lo vemos todos los días).
También predicen: “Revuelta de militares o insubordinación. Explosiones, secuestros, extravíos, huecos, desapariciones, pérdidas, situaciones bancarias, crisis o ausencias que causan  tensión o son un obstáculo para que continúes con tus actividades cotidianas”. (¡Chan!)
“Se ve como uno de esos días en lo que  lo mejor será estar prevenido porque cuando menos te lo esperes te puede pasar algo raro, imprevisto o que implique un cambio brusco en tu rutina.  No baja el riesgo de sufrir accidentes, que haya problemas por tormentas, asuntos de electricidad, tecnología, rebeldía, huelgas o el estrés.  Un día con tendencia a las devoluciones, los retrocesos y a obtener resultados adversos. Puede haber retrasos, obstrucciones, desorganización, pérdidas, renuncias, problemas en canchas de fútbol, con la construcción o al tratar de formalizar situaciones, caso que te toque la sugerencia es actuar con paciencia y perseverancia. Si tienes que estar en sitios oscuros, repetir situaciones del pasado, manipular explosivos, gavetas o puertas, vadear huecos, pierdes algo, te extravías o se manifiestan crisis en tu vida lo recomendado es evaluar rápidamente la situación para determinar en la marcha si tienes que detenerte, cambiar de rumbo o romper alguna relación para así acomodar lo que esté pasando o realizarlo con sumo cuidado mientras distribuyes las cargas”.
En fin, todo mal a la décima potencia, sólo falta que aparezca Jason con su machete o su motosierra y nos mate a todos, jajaja.

SIEMPRE LAS LEYENDAS
Después de semejantes predicciones drásticas me detuve a imaginar qué sería de este mundo si no tuviéramos leyendas, si no hubiera dichos populares, mitos a los cuales atenernos. (Tranquilos no me voy a poner a hacer una análisis sociológico y semiológico, ni a mencionar a Roland Barthes y su clásico “Mitologías”). Sólo pensaba en eso. Y me creo que seríamos como niños que todo nos llamaría la atención y que sería ver la vida de una forma más inocente, en fin, no sé.
Todo esto iba a propósito de los orígenes del Martes 13 y como siempre hay leyendas e historias asociadas a estas creencias populares. Obviamente no hay que olvidarse del Viernes 13 (ya lo tuvimos en mayo)  que para la tradición judeo cristiana es tanto o más peligroso, ya que según la Biblia , Jesús murió un viernes, que se supone era 13, y según la historia, la Orden de los Templarios fue aniquilada también un viernes 13.
Estas fechas infunden tanto temor porque provienen de distintas vertientes. Las leyendas nórdicas hablan de 13 espíritus del mal; la venida del Anticristo y la Bestia aparecen en el capítulo 13 del Apocalipsis; en el Tarot, el 13 hace referencia a la muerte; y tras la Última Cena con sus 12 apóstoles, el comensal número 13, o sea Jesús, fue crucificado.
El día de la semana no se queda atrás: "Marte", según la mitología romana (Ares, para los griegos) es el dios de la guerra, lo que hace que el día martes esté regido por el planeta de la destrucción, la sangre y la violencia.
Además, un martes 13 se produjo la confusión de lenguas en la Torre de Babel, luego de que el buen Dios se enojara con los hombres y los condenara a no entenderse, por haber querido treparse al cielo.

NÓRDICOS, CRISTIANOS Y TEMPLARIOS
La mala suerte asociada a este número también se remonta a la mitología nórdica, esto es, a los celtas y normandos.
Se cuenta que a un banquete en el Valhalla, adonde habían sido invitados doce dioses, se "coló" Loki, el espíritu del mal, con lo que los presentes fueron 13. En la lucha que se produjo para expulsar a Loki, Balder, el favorito de las deidades, encontró la muerte.
Esta es una de las primeras referencias escritas sobre el infortunio relacionado con el 13; desde Escandinavia, la superstición se difundió a través de Europa y al comenzar la era cristiana ya estaba establecida en los países mediterráneos.
Se dice que esta creencia fue reforzada con el episodio de la Última Cena y desde ese momento hasta hoy, invitar a trece personas a comer, significa que una de ellas encontrará la muerte dentro del año.
La mala fama del viernes 13 se popularizó como consecuencia de la serie de películas de terror "Friday the 13th", pero como ya se ha dicho, arranca con el viernes de Pascua en que Jesús fue crucificado y se reafirma con la eliminación de los Templarios.
En el siglo XIV reinaba en Francia Felipe IV, cuya corona en ruinas dependía financieramente de la Orden del Temple: sus deudas eran tan colosales que casi podría decirse que el reino galo pertenecía a los Templarios.
Felipe IV se propuso acabar con esa dependencia y llenar sus arcas con los bienes de la orden, para lo cual urdió una trama: acusó a los Caballeros del Temple de herejía, asegurando que "renegaban de Dios, escupían sobre su imagen y adoraban a un ídolo".
Con el mayor sigilo se preparó el arresto de todos los Templarios que vivieran en tierras francesas. Para esto se remitieron cartas de doble pliego a todos los alcaldes: en el primero, se les informaba que habrían de seguir las instrucciones contenidas en el segundo; y que éste lo abrirían sólo en una fecha determinada y a una hora exacta.
El 12 de octubre de 1307 los funcionarios abrieron el segundo pliego de la carta y al alba del viernes 13 de octubre, los 4.000 Templarios de Francia fueron arrestados a la vez, incluido el Gran Maestre, Jacques de Molay. Casi todos fueron torturados y muertos en la hoguera.
Muchas personas creyeron que esta aniquilación era una desgracia y desde entonces entre los galos pasó a considerarse el viernes 13 como una fecha fatídica, creencia que aún persiste.

COSTUMBRES POPULARES
El refranero popular dice:
"El martes, ni te cases ni te embarques.
El martes ni gallina eches, ni hija cases.
El martes ni hijo cases, ni cochino mates.
El martes ni tu casa mudes, ni tu hija cases, ni tu ropa tejas”.

Entre las supersticiones asociadas tanto al martes como al viernes 13 están la de no tener jamás trece invitados en la casa y no cortarse las uñas o el pelo ese día, porque trae mala suerte. También se tendrá que evitar pasar bajo una escalera y no hacerse tirar las cartas ni encargar "trabajos" de brujería, porque podrían tener el efecto de un bumerang.
En el Primer Mundo es donde más miedo infunde el 13: en los Estados Unidos, los hoteles saltan la numeración del piso 12 al 14 y no hay habitación con aquel número.
En la mayoría de los autódromos de Europa, ninguno de los talleres donde los autos tanquean y cambian de llantas, lleva el número 13.
Muchas aerolíneas evitan este número en sus asientos y hasta no hace mucho, los artistas tenían en sus contratos una cláusula por la que no actuaban el 13 del mes.
En Sudamérica, donde no hubo similar botín a saquear, el viernes 13 pasa casi desapercibido, en tanto que el martes 13 se lleva todas las palmas en materia de malos designios.
Como les decía y según los pronósticos para hoy todo lo malo junto puede pasar, pero yo les diría que no se preocupen, si se mueren seguramente será de forma patética y propiciada por su propia estupidez o la de un tercero y no por casarse, embarcarse, mudarse, pasar debajo de una escalera, abrir un paraguas dentro de sus casas o lo que sea. Disfruten de este día, traten de ser feliz y hacer felices a los demás, seguramente algo bueno les sucederá.

lunes, 5 de septiembre de 2011

¡Viva la primavera!

Primer lunes de septiembre, el mes de la primavera. Si bien amaneció un poco fresquito, está lindo. Lástima el nublado que no acompaña. Pero a no desesperar, ¡ánimo! Hoy me resisto a pensar en cosas que no sean agradables. Ya llegan los días más largos, noches frescas pero con lunas espectaculares, los calorcitos, mucho sol y cantidad enorme de flores. Como previa a la estación más linda del año, les dejo unas florcitas casi silvestres otras no tanto, que fotografié en el fondo de casa. Espero que les gusten y que alegren sus días con vivos colores.