domingo, 29 de septiembre de 2013

Marina y Ulay



Amor, eternidad, felicidad. Son generalmente tres expresiones a los que asociamos indefectiblemente entre sí y anhelamos poder vivirlos, sentirlos, para siempre. ¿Pero cuánto es para siempre? ¿Cuánto es eternamente? ¿Toda una vida? ¿Mientras dure tu vida? ¿La mía? ¿Cómo estar seguros que ése es el amor? ¿Cómo saber si realmente somos felices o nos autoconvencemos que lo somos? ¿Amor es tener a alguien, o es amar a alguien aún cuando no lo tenemos? ¿Cómo sabemos que amamos a esa otra persona? ¿Es sentir que no se puede vivir si no está? ¿Amar es también sentir dolor? ¿Es creer que si el otro muere ya no hay razón para continuar viviendo?